INGLATERRA En el estadio Manchester United con capacidad de 21.000 personas, finalizaba el concierto de la cantante norteamericana Ariana Grande, una de las más populares de jóvenes y niños.
La gente iba saliendo antes que termine el show, muchos padres y madres esperaban afuera a sus hijos.
Cuando el público empezó a salir, fue el momento que escucharon una grandiosa explosión que entre gritos y llantos corrían desesperadamente hacia la salida del estadio.
Eran las 22:38 hs, fuera de la escena del show, cerca de la boletería del Manchester Arena, supuestamente, escucharon un grito fuerte de un suicida inmolándose, detonando una bomba casera, lo que ocasionó la muerte a 22 personas y 60 heridos de gravedad.
A las 23:02 hora local, los primeros informes del terror golpearon los canales de las Redes Sociales y viraliza la noticia en Twitter y Facebook.
La policia manejó como un atentado. El caso aún está en investigación
